La miopía se ha vuelto una crisis visual a nivel global

La crisis de Miopía

 

Miopía es un error refractivo, un ojo con miopía no puede ver con claridad a distancias lejanas. La miopía se hace presentes cuando el ojo es muy largo o la córnea tiene una mayor curvatura, lo que ocasiona que los rayos de luz no lleguen de manera correcta a la retina.

 

Dia con día más pacientes se ven orillados a depender de anteojos o lentes de contacto para abordar la miopía. Según estudios recientes se estima que por lo menos el 30% de la población en el mundo sufre de miopía.

 

Se cree que el aumento de los casos de miopía en el mundo es a causa del cambio en el estilo de vida y costumbres que se generaron a raíz de la pandemia. Investigaciones y estudios indican que en un aproximado de 35 años al menos la mitad de la población mundial padecerá de esta condición visual. El mayor porcentaje de personas miopes se encuentra en países asiáticos como Taiwán, China, Japón, Singapur y Corea del Sur.

Sin embargo, esta condición visual no se limita a esta región del mundo, en América se ha registrado un gran incremento de pacientes con miopía, Principalmente en países como Estado Unidos, México y Brasil. Lo cual revela que este defecto ya es una problemática de salud mundial puede afectar a cualquier persona sin importar edad u origen.

 

La miopía no solo representa una cuestión de comodidad visual, ya que puede conllevar a consecuencias graves par la salud de nuestra vista y nuestros ojos. De no ser atendida adecuadamente y en tiempo pertinente, la miopía en un alto grado puede contribuir a otro tipo de patologías visuales, como maculopatías miópicas, alteración en el nervio óptico o glaucoma, estas condiciones impactan negativamente y directamente a la calidad de vida de las personas incluso con un fin pero que es la ceguera.

 

 

Estilo de vida y secuelas de la pandemia

 

 

Aunque los genes y antecedentes familiares de miopía incrementan las posibilidades de desarrollar esta condición, algunos especialistas afirman que la genética solo tiene un pequeño papel en este juego. Expertos indican que un factor con mayor peso para desarrollar miopía son el estilo de vida y costumbres que aumentaron en tiempo de pandemia debido al confinamiento como la disminución del tiempo al aire libre y actividades que requieren de un enfoque prolongado (lectura, trabajar con pantallas y ordenadores).

Con la adopción de los nuevos modos de enseñanza y de trabajo en línea, es mas que evidente que las horas que pasamos frente a una pantalla se han incrementado drásticamente. Lo cual requiere de un enfoque prolongado que puede ser un riesgo para desarrollar miopía.

 

 

En busca de soluciones

 

Es de suma importancia afrontar esta problemática y adoptar las medidas adecuadas para disminuir la incidencia de miopía.

Existen diferentes alternativas terapéuticas y quirúrgicas que sirven para atender y frenar la miopía desde fármacos, hasta lentes de contacto y anteojos con lentes oftálmicas específicas, estas opciones han demostrado efectividad en la reducción del progreso de la miopía.

 

Por otra parte, es fundamental adquirir la costumbre del cuidado de nuestra salud visual llevando a cabo revisiones periódicas con el oftalmólogo principalmente en la niñes para detectar y tratar la miopía o cualquier problema a tiempo esto puede evitar complicaciones oculares graves.

 

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