Las lágrimas suelen aparecen en muchos episodios a lo largo de nuestra vida, ya sea por una reacción emocional o como respuesta al dolor. Las lágrimas son un líquido que sirven para lubricar y limpiar los ojos producido por un proceso llamado lacrimación; tienen como función nutrir y proteger la superficie externa del ojo, principalmente la córnea manteniendo el ojo humectado y eliminando residuos o cuerpos externos para evitar infecciones.
Estas se producen principalmente por las glándulas lagrimales y aumentan ante la amenaza de agresiones externas como cuerpos extraños o cambios de temperatura. Al aumentar las lágrimas también se incrementa el flujo nasal produciendo mayor salida de líquido por la nariz. La obstrucción mecánica de las vías lagrimales es una patología ocular, que impide que las lagrimas no avancen hacía el trayecto nasal desbordándose por encima de los parpados, convirtiéndose en un lagrimeo bastante constante. Sin embargo, en la patología de ojo seco surge el efecto contrarío ya que la glándula lagrimal se ve afectada disminuyendo la producción de lágrimas. Los síntomas de esta patología incluyen la sensación de algo extraño en el ojo, sequedad y en algunas ocasiones visión borrosa. Por lo tanto, se recomienda al paciente utilizar lagrimas artificiales. Los síntomas del ojo seco incluyen la sensación de un cuerpo extraño en el ojo, sequedad e incluso visión borrosa que obliga al paciente a usar de forma continuada lágrimas artificiales.
¿LAGRIMAS ARTIFICIALES?
Las lagrimas artificiales son para ti que padeces de resequedad en los ojos provocada por el envejecimiento, medicamentos, cirugía ocular, factores ambientales o alguna afección médica, ayudando a mantener humectados los ojos. Las lágrimas artificiales también tienen otra función ayudando a la cicatrización rápida y disminución de evaporización de lágrimas. Existen dos tipos de presentaciones de lágrimas artificiales:
1. Gotas para los ojos con conservantes:
Contienen conservantes (sustancias químicas) para evitar el crecimiento de bacterias después de que es abierto el frasco. Es importante mencionar que los conservantes podrían irritar los ojos si se presenta sequedad ocular grave.
2. Gotas para los ojos sin conservantes: Este tipo es el más recomendable para aplicar más de cuatro veces al día y se tiene sequedad ocular moderada ya que contiene menos aditivos (sustancias químicas).
