Manejo adecuado del diagnóstico y tratamiento de la “Retina”

Desprendimiento de retina

En gran parte de los casos del desprendimiento de retina su causa principal es por desgarros que se crean en la retina; el desgarro sucede cuando el material gelatinoso, traslucido (vitreo) y adherido a la córnea comienza a envejecer y se encoge, por lo tanto cuando el tejido de la retina ha estirado bastante puede causar el desgarre; al darse este desgarre se da paso al líquido del lugar vitreo hasta el espacio que está entre la retina y la parte posterior del ojo ocasionando que la retina se comience desprender de los mantos de tejido que se ubican por debajo. Ésta representa una de las enfermedades visuales más severas en México si no es atendida a su debido tiempo. Entre otras causas frecuentes están la miopía alta y la inflamación ocular.

¿Que ocasiona?

La parte afectada de la retina no cumplirá con su función de forma adecuada ocasionando la aparición de cortinas transparentes, manchas flotantes o algún tipo de borrosidad tipo neblina.

El desprendimiento debe ser tratado lo antes posible de lo contrario puede ocasionar inflamación ocular de manera crónica, donde se presenta una atrofia considerable en la retina y con el tiempo se atrofia por completo el ojo dando paso a la perdida completa de la visión. La retina debe ser colocada en su posición correcta en un tiempo de corto plazo (días). En Aris Vision México se realiza una completa valoración de tu salud visual para una pronta detección y evitar su progresión.

Alternativas para el desprendimiento retinal

La mayoría de las operaciones para desprendimiento de retina son de manera urgente. En caso de hallar rupturas o huecos en la retina antes de que esta se desprenda, el especialista tiene oportunidad de sellar los orificios por medio de un láser.

La cirugía con láser permite dar la atención al hueco o el pequeño desgarre en la retina. El cirujano oftalmólogo realiza pequeños puntos con el láser sobre la retina dando como resultado una pequeña cicatriz que unifica la retina al tejido principal.

Si la retina ya inicio a desligarse se puede aplicar el procedimiento de Retinopexia neumática esta técnica ayuda en la reparación de algunos tipos de desprendimiento de retina. En esta técnica el oftalmólogo inyecta una pequeña burbuja de gas en el ojo, posterior a eso se busca ubicar al paciente en una posición que ayude a que la burbuja vaya hacia arriba contra el hueco de la retina empujándola hasta su lugar original. Al termino se utiliza un láser para el sellado de este orificio. Conforme el ojo va curando, se produce el líquido que rellena el ojo; Este líquido va a sustituir de manera gradual el gas inyectado.

También existe la Microcirugía ocular Vitrectomía esta técnica se emplea para retirar el vitreo (líquido gelatinoso que rellena la cuenca ocular) el líquido se extrae por una pequeña incisión y se suplanta por una burbuja de aceite, gas o aire, la función de esta burbuja será empujar la retina a su lugar para que permita sanar correctamente. En caso de utilizar la burbuja de aceite será removida meses después. Si se coloca la burbuja de gas o aire el paciente no podrá viajar a lugares de mucha altitud ni bucear o sumergirse en agua, ya que esto puede alterar la presión ocular.

Retinopatía diabética

Como lo menciona su nombre es una enfermedad provocada por la diabetes, esta enfermedad es muy común en México por el alto número de pacientes con diabetes y también representa una causa principal de la pérdida total de visión, comúnmente afecta a los dos ojos; esta surge cuando se presenta daño en los vasos sanguíneos en el tejido de la retina provocando filtración de líquido dentro y debajo de la retina, es por esto que se inflama y provoca una visión borrosa. Como bien se sabe en pacientes con diabetes la glucosa no controlada es gran factor de riesgo.

En un estado inicial el paciente que tiene retinopatía diabética no observa ningún cambio en su visión, pero al tratarse de una enfermedad degenerativa va avanzando hasta causar disminución en la visión del paciente.

¿Que lo causa?

El factor principal sin duda es el mal manejo de la diabetes; en el momento en que los niveles de azúcar en la sangre se elevan y se mantienen altos por mucho tiempo pueden ocasionar daño a los capilares (pequeños vasos sanguíneos) de la retina. Con el progreso del daño comienza un escape de líquido causando una inflamación en la macula (zona pequeña dentro de la retina) esta es la forma más frecuente en la que el paciente con diabetes pierde la vista.

En algunos casos los vasos sanguíneos se cierren y se le conoce como Isquemia macular afectando el flujo de sangre en la retina propiciando la formación de pequeñas partículas que afectan la visión, esto se puede presentar en una etapa temprana de la retinopatía (retinopatía diabética no proliferativa).

En caso de que el paciente no reciba atención durante una etapa temprana la patología puede evolucionar a una retinopatía proliferativa, en esta situación el cierre de los vasos sanguíneos genera el crecimiento de nuevos vasos anormales en la retina (neovascularización) esto puede ocasionar sangrados dentro del ojo, inclusive estos vasos anormales y el tejido fibroso pueden encoger demasiado produciendo un desprendimiento de retina.

Tratamiento

Comúnmente el tratamiento adecuado dependerá del tipo de retinopatía diabética que presente el paciente, tomando en cuenta la gravedad. El objetivo principal es mitigar o frenar por completo el avance.

Si el paciente presenta una retinopatía diabética no proliferativa puede que no se requiera del tratamiento de inmediato. Aunque nuestro oftalmólogo debe llevar el control y manejo para determinar el momento en que sea necesario el tratamiento.

En ocasiones cuando la retinopatía diabética está en una etapa muy temprana es posible pausar o disminuir su avance con un buen control de la glucosa, en caso de que el paciente tenga retinopatía diabética proliferativa o exista un edema macular se recomienda tratamiento inmediato para evitar su progresión.

Una alternativa sería la terapia antiangiogénica intravítrea, es un procedimiento por el cual se suministra medicamentos al ojo por medio de inyecciones, el medicamento es inyectado directo sobre el humor vitreo (liquido gelatinoso) muy cerca a la retina en la parte posterior del ojo. Este procedimiento comúnmente se usa para suministrar una cantidad mayor de medicamentos a la retina. La aguja con la que se suministra el medicamento es muy pequeña por lo tanto no genera dolor mientras que un dispositivo ayuda a mantener los parpados separados, será necesario repetir las inyecciones según lo indique el oftalmólogo. En algunos casos el medicamento es utilizado con la fotocoagulación.

La fotocoagulación con láser consiste en una cirugía por medio de laser en la cual se busca reducir o acabar con formaciones anormales en la retina, también detener el goteo de sangre y liquido en los vasos sanguíneos anormales.

La fotocoagulación se lleva a cabo creando quemaduras microscópicas con puntos láser en patrones sobre el tejido deseado, este tratamiento con láser normalmente es realizado en una sola sesión. En caso de que se presente una visión borrosa por edema macular antes de la intervención, es posible que no se permita la recuperación de una visión normal, pero ayudará a reducir las probabilidades de que el edema macular empeore.

La vitrectomía puede ser utilizada también en la retinopatía como ya se mencionó anteriormente en el desprendimiento de retina, este proceso conlleva una pequeña incisión por el cual se hace la extracción del humor vitreo para sustituirlo con una burbuja de gas, aire o aceite para empujar la retina a su lugar.

Aunque los tratamientos pueden retrasar la evolución de la retinopatía diabética no representa una cura total ya que la diabetes persiste toda la vida; el paciente puede generar este daño en un futuro si no se lleva un control adecuado en su glucosa.

Degeneración macular relacionada con la edad

Conocida por sus siglas como (DMRE) esta es una enfermedad degenerativa que afecta de forma directa a la retina mermando nuestra visión central (casi nunca afecta la visión periférica). Debido a la DMRE el paciente tiene mayor dificultad para apreciar detalles finos ya sea de cerca o la lo lejos, ambos ojos se ven afectados por esta condición sin embargo la gravedad puede variar entre ellos. En algunas personas mayores se puede presentar como parte del proceso de la vejez natural del ojo.

Comienza con la formación de depósitos debajo de la retina llamadas drusas maculares provocadas por la degeneración macular, hay alteración en la capa pigmentaria y en algunos casos hay presencia de vasos sanguíneos anormales debajo de la retina, estas representan las alteraciones más frecuentes. Una vez que la degeneración macular dio lugar a la ceguera se da regularmente en un solo ojo, pero el segundo se puede ver amenazado después.

Tipos de DMRE

• DMRE Seca: este tipo de degeneración macular es generada cuando las células sensibles a la luz que se encuentra en la macula sufren un deterioro progresivo a causa de la edad ocasionando que la vista central del ojo afectado se opaque paulatinamente, conforme la degeneración sigue avanzando es posible que se perciba un punto nebuloso justo en centro de la visión. DMRE seca es el tipo de degeneración más frecuentes entre los pacientes alcanzando casi el 85% de los casos.

Entre los síntomas más típicos de la degeneración macular seca se origina una vista algo difusa, el paciente puede presentar problema para reconocer las caras de las personas. Puede que se requiera de mayor cantidad de luz para realizar actividades como leer o tareas alternas. En este caso es normal que se vean afectados los dos ojos, pero la gravedad varía entre ellos, el ojo más afectado puede llegar a perder la vista y el otro puede aparentar una buena condición.

La señal más común en este tipo de degeneración es la aparición de drusas musculares (depósitos amarillentos que se crean debajo de la retina) dentro de la degeneración macular seca existen etapas de progreso.

• • Degeneración macular temprana. – El paciente tienes drusas pequeñas o medianas, en esta etapa no se ve afectada la visión
• • Degeneración macular intermedia. - Las drusas presentes son de mayor tamaño o en mayor cantidad, se percibe un punto borroso en el centro visual
• • Degeneración macular avanzada. - Aparte de las drusas se presenta deterioro en las células sensibles a la luz y el tejido en el área del centro de la retina, el punto borroso que se visualizaba se hace más grande opacando más la visión central.

También es común que en este tipo de DMRE exista la presencia de las drusas. Por lo general no causan perdida de vista, pero si se llega a dar un aumento en el tamaño o en la cantidad de drusas esta puede desarrollar la degeneración macular seca avanzada o la forma húmeda. Estas alteraciones pueden propiciar la ceguera.

• DMRE Húmeda: Es la menos común pero la que mayor amenaza presenta por la gravedad, este tipo de degeneración se produce en el momento en que los vasos sanguíneos anormales ubicados detrás de la retina inician a desarrollarse debajo de la mácula. La aparición de estos nuevos vasos sanguíneos es el principio a este mal ya que estos vasos sanguíneos suelen ser demasiado frágiles, continuamente se fuga sangre y líquidos a la retina ocasionando cicatrices en la macula o levantando la macula de su lugar original al fondo del ojo, en estos casos la macula sufre daño rápidamente.

La desaparición de la vista central con degeneración macular húmeda ocurre con mayor velocidad y es aún más severa que la forma seca ya que en esta no se manejan etapas. De las principales señales de la DMRE húmeda es que las líneas rectas se perciben onduladas, se recomienda que en cuanto el paciente note estos u otros cambios en la visión debe acudir con el oftalmólogo especialista.

Alternativas de tratamiento para DMRE

Si el paciente tiene DMRE avanzada o seca grave, ningún tratamiento puede restablecer la visión en su totalidad, es por eso que en Aris Vision México se realizan valoraciones y exámenes completos para detectar a tiempo esta degeneración y poder contribuir a un mejoramiento notable antes de que sea demasiado tarde.

En caso de que el paciente tenga DMRE inicial se puede recomendar un coctel de ciertas vitaminas, antioxidantes y cinc ayudando a evitar que la enfermedad empeore, aunque esto no recupera la visión que se haya perdido.

Esta combinación de suplementos a menudo lleva como nombre AREDS. Los suplementos indicados contienen:

• • 500 miligramos (mg) de vitamina C
• • 400 unidades internacionales de betacaroteno
• • 80 mg de cinc
• • 2 mg de cobre

Estos suplementos solo pueden ser indicados por el especialista y cabe mencionar que entre pacientes fumadores no se puede indicar este tratamiento. Este tratamiento puede ser de ayuda si existen antecedentes familiares de DMRE previniendo así dicha patología.

En la DMRE húmeda es más común la cirugía láser ya que al ser un procedimiento con uso de láser acaba con los vasos sanguíneos anormales que sangran o gotean líquido. El rayo láser con gran intensidad es enfocado directo a los vasos sanguíneos anormales propiciando su eliminación para evitar una mayor perdida. Solo se puede atender con láser a un porcentaje de pacientes con degeneración macular; nuestro especialista realiza exámenes completos para saber si es un candidato a esta intervención de lo contrario se le brinda otras alternativas. Esta cirugía genera más efectividad si los vasos sanguíneos a eliminar se localizan lejos de la fóvea (parte central de la macula).

Por último, al igual que en el desprendimiento y la retinopatía diabética la terapia antiangiogénica intravítrea se puede usar como una alternativa más en la degeneración macular, esta terapia impedirá los impactos del factor de crecimiento, las inyecciones se deben poner periódicamente según el oftalmólogo especialista lo indique.

En Aris Vision México contamos con un equipo de oftalmólogos especialistas y con los tratamientos más innovadores y seguros para proporcionarle una mejora a su salud visual. Acuda a realizar su valoración completa donde se identificará cualquier padecimiento que pueda presentar dándole seguimiento con el mejor tratamiento determinado por nuestro especialista. Recuerde que una pronta detección marca una gran diferencia.